Para los científicos, monitorizar a estos tiburones permitirá entender mejor lo importantes que son para su supervivencia las aguas de Long Island, en el estado de Nueva York. El equipo formado por investigadores de varias instituciones estadounidenses, lideradas por OCEARCH, tomaron además muestras de sangre y datos sobre su estado de salud en esta fase inicial de su vida.
viernes, 25 de noviembre de 2016
Criadero de tiburones blancos en Long Island
“Hemos aprendido mucho sobre los tiburones adultos en los últimos años, pero los juveniles siguen siendo un completo misterio”, declara Tobey Curtis, científico en la NOAA Fisheries, centro que se ha encargado de etiquetar a dos de las crías llamadas Montauk –una hembra de 22 kilos y poco más de un metro de largo– y Hudson –un macho de 30 kilos y un metro y medio de largo–, protagonistas de #Cienciaalobestia esta semana.
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